Estoy harto de que los ricos con consciencia social me defienden.

Artistas multimillonarios que viven en mansiones en ciudades caras en partes del mundo que nunca visitaré, hablándole a los políticos o a los empresarios de pasar hambre, de pasar frío, cuando ellos nunca han pasado necesidad en sus vidas. Sé que debería apreciarlo, pero no puedo. Me molesta mucho, incluso si lo hacen con intenciones honestas y no para lucrar a partir de la desgracia de los desposeídos (aunque es imposible saber si esta es su intención o no). Mil veces preferiría que le dieran voz a los que nunca han tenido voz en la historia, para que ellos mismos cuenten su desgracia. Ya saben, pararse atrás, o a un lado, pero no adelante.

No sé si esta es una opinión impopular o no, la verdad no me importa. Sólo quería decir algo que tenía guardado y que no había escuchado a nadie decir.