La semana pasada nos llevaron de paseo a Valparaíso. La agencia que nos invitó nos propuso como gran atractivo del paseo ver las instalaciones físicas de donde sale internet para estar disponible en nuestro país. La sorpresa era que es sólo un “clave” (un cable, no un satélite ni el viento) de cinco centímetro de grosor, es el que permite que la mitad de las empresas de telecomunicaciones distribuyan internet a todos los usuarios. Es decir gracias a estas instalaciones te llega internet a ti, a mí, y todos aquellos que contraten servicio de conexión.
La expectación entre grupo de periodistas era grande. “¿Cómo será el clave?, ¿será un cable súper grueso?, ¿habrá mucha gente contratada?, ¿quién será el sr. dueño de internet?”. Y todo ese gran misterio se reveló al llegar a Global Crossing, el proveedor global de soluciones IP, que tiene más de 88.000 millas de ruta en el mundo a través de un sistema de clableado submarino y es uno distribuidores en Chile (sólo hay dos en el país).
No éramos más seis periodistas, y mucho antes de ingresar a las oficinas nos advirtieron todas las restricciones: no podíamos sacar fotos de los equipos, no se puede filmar y no se puede tocar nada. El problema es que todas esas condiciones no las tomaron en cuentan los reporteros gráficos que se molestaron. Más de una mala cara se vio durante esa jornada, pero aún así el resto recorrió el lugar con mucha curiosidad.
Antes de conocer el sistema completo, tuvimos una bienvenida con una charla de presentación de la empresa. En ella, Italo Godoy, gerente de las instalaciones de Global Crossing en Valparaíso, relató la experiencia de cómo se trabajó en las instalaciones del cableado en 2000.
Pero para instalar el cable se necesita más que coordinación, de hecho, se necesitó un grupo de expertos y mucha tecnología para concretar la misión con efectividad. Tener un barco que disponga de los kilómetros de cable de fibra óptica es lo primero; después este debe posar en cable en las profundidades del océano, todo hecho con la precisión necesaria para que no se perjudique el cable, ni el lugar donde éste esté instalado. Estas herramientas en teoría tienen una vida útil de 30 años, y como describí, permanecen posados sobre la superficie marina, y además fueron creados especialmente para soportar bajas temperaturas bajo el mar o mordeduras de tiburones.
Es cierto, no son invencibles y necesitan ser monitoreados por los Global Crossing todo el tiempo, pero hasta el momento no se ha detectado ningún problema en el país.
Ahora, otra de nuestras sorpresas fue el lugar donde se hizo la instalación: este súper “clave” está una de las playas de Valparaíso y a dos metros de profundidad de la arena, que desde un túnel se va ubicando hasta llegar al mar y luego al resto de los países conectado a la red de Global Crossing.
Una vez colocados los cables en el mar, el grosor de éstos jamás debe ser muy grande porque debe aguantar 4.000 metros de presión de agua, enfatizó Godoy. Pero toda la magia no depende de ese cable: es el trabajo de los repetidores el que permiten que el internet viaje, con una velocidad de 5 terabits por segundo, algo así como una capacidad incalculable si se la compara con la velocidad para navegar en la web desde la casa.
Aunque en las oficinas de Valparaíso no son necesarias más de 5 personas a cargo de la conexión para que se concrete efectivamente, el edificio está resguardado por un sistema de protección de “baterías” que permiten resguardar la funcionalidad de las máquinas hasta tres semanas después de quedar sin electricidad.
La visita no sólo sirvió para conocer a una de las empresas responsables de la conexión nacional, también para mostrarnos cómo sin querer cuando caminamos por Valparaíso no sólo disfrutamos de la vista frente a nuestro querido mar, también estamos acompañados de una tecnología de alto nivel, que sin perjudicarnos (según se nos explicó no daña el medio ambiente) nos proporciona de uno de los servicios necesarios para vivir: el intocable y respetado Internet.
Montserrat Lecaros
lanacion.cl
Eh me pareció interesante buscar fotos de las instalaciones en Valparaiso de Global Crossing y me encontré con este articulo bastante básico, pero que no deja de ser interesante.
Todo partió cuando encontré esta foto
http://www.flickr.com/photos/gato-multicolor/5663127232/in/photostream