A mí toda ideología que sustenta la violencia como forma política me parece "peligrosa" para los tiempos actuales, sobre todo luego de las calamidades que dejó el pasado siglo XX. Una ideología puede basarse en los ideales más nobles, querer propender a la igualdad, la libertad de todos los hombres, pero así como la Revolución Francesa la pretendió, el Terror de los jacobinos llevaba a la decapitación a cualquier disidente. No estamos para esos tiempos, si como anarquista quieren adjudicar sus teorías de lucha contra el Estado, como algo histórico, desconociendo el Derecho actual, solo por que este se basa en una mera dominación de clases, entonces, insisto, o hay dos vías: el sistema político se abre a más participación, o los anarquistas van a tener que encontrarse contra la fuerza inherente del Leviatán. Pero como no creen en la primera, seguramente van a intentar chocar contra el Estado, en vez de ser partícipe de él. Los mismos Sacco & Vanzetti, Durruti, Malatesta reivindicaban la lucha violenta, como autodefensa. Sigue de la misma forma. Hay cientos de atentados explosivos en el mundo hechos por anarquistas: el Unabomber, Jean-Marc Rouillan el asesino del presidente de Renault Georges Besse, la Vanguardia Organizada del Pueblo en Chile, asesinos del Pérez Zujovic, los nihilistas rusos, los anarquistas de España y los fusilamientos de sacerdotes, opositores. Las acciones de anarquistas en la última década, y podríamos seguir. De todas formas, un anarquista justifica su violencia por el hecho de que se considera en permanente violencia simbólica. Es una dialéctica, como tal paradójica, mientras tanto aumenta la catarsis.