Me gusta comprar hueás malas baratas y arreglarlas, principalmente consolas TVs notebooks tecnología en general, pero a veces otros como antiguedades, línea blanca etc. Hasta ahí bien, se supone lo hago como hobby y de paso ganar lucas (tengo pega estable). El problema es que una vez reparadas no las vendo nunca.

Desde mi pieza veo arrumbados unos 7 notebooks, 5 teles sobre 40", un par de Xbox 360, varias Dreamcast y PS1, una lavadora, 2 A/C portátiles, no sé cuantos drones, y 2 cajas plataneras literalmente llenas de gadgets (tablets, routers, celulares vintage, hardware raro). Siempre digo que voy a vender pero me da flojera, o me pongo a hacer otras cosas o simplemente me da lata. Ver todo ahí me da satisfacción, un propósito en la vida, rescatar cosas que de otra forma serían basura en esta sociedad consumista de mierda. Y en el intertanto sigo comprando y acumulando cosas. La última vez que fui a la feria a vender me hice unas 200lks (en realidad 180 porque me cagaron con 20 falsos) y fue hace 4 meses, más de la mitad de esa plata la ocupé en comprar más cachureo. De hecho hasta tuve problemas con otros puestos de ropa etc, viejas culiás envidiosas ww.

Probé el ciclismo, no me gustó. Subir cerros, probar 420, ir a eventos... nada me atrae. Reparar es como una droga que calma mi mente, sumergirme en datasheets y manuales de servicio y sentir esa satisfacción de encontrar la falla...

Dígame usted baisano, ¿necesito un psicólogo, una PLR o ambos?