El protagonista es un gatito que tiene inteligencia humana y puede hablar como resultado de exponerse a la radiación del invierno nuclear. Él y su familia viven de la ayuda de los humanos en una comunidad humana cercana (es una de las tantas comunidades basadas en la solidaridad que surgieron después de la guerra nuclear; es muy prospera y feliz) pero un día encuentra que la mayoría de personas desaparecieron y que masacraon al resto. Entonces toda la familia de gatitos deberá emprender un viaje acosados por el hambre en el que, sin buscarlo, descubrirán a los responsables de la tragedia: un feudal robótico (cosa que se revela en el clímax, ya que tiene apariencia humana) y su pandilla que se dedica a buscar ese tipo de asentamientos humanos (que están es zonas muy remotas, para evitar la radiación de las antiguas ciudades) y forzar a sus habitantes a trabajar en su gran ciudad para reconstruir la vieja civilizacion.

^Ah, y el robot es parte de un proyecto gestado en los búnkeres de las antiguas élites que irónicamente sufrieron la radiación más que las comunas ya que, creyendo muy distante la guerra, se dedicaron a malversar los fondos para la construcción de esos refugios. Todos murieron con tumores por todo el cuerpo.
La comuna del gatito está en alguna parte de la cordillera de los Andes y la gran ciudad está en lo que antes era Taiwán.

ALTO XENOGEARS

Además, lo gracioso de este robot, a quien se le dio la aparencia de humano solamente para dar confianza a la gente, es que es muy rígido en su forma de actuar y trata de recrear la civilización antigua de forma extremadamente fiel en su ciudad. Todos los males modernos (pobreza, hambre, racismo...) son artificiales y son implementadas con reglas que serían consideradas hoy no nefastas, sino ridículas. Todo esto porque él es un robot y no sabe de sutilezas (¿hipocresías?).

Puta cabros yo hago todo y siempre dejan las weas botás