La aceleración tecnosocial significa distopía con una gran cantidad de mecanismos de control de mercado y no de mercado que se cruzan para mantenerlo así. El capital puede construir paredes y romperlas también; Los propietarios juegan según sus propias reglas, su propia geografía.
El capital dibuja, vuelve a dibujar y hace cumplir las líneas entre los trabajadores de acuerdo con la necesidad estructural: sabe cómo luchar una guerra de clases como una guerra de razas y llamarla una guerra contra las drogas; sabe que si sometes a las mujeres a una cultura de abuso físico, psicológico, sexual y emocional, puedes pagarles menos; sabe que las fronteras no son para mantener alejadas a las personas, son para controlar los salarios de las personas que dejan entrar. ¿Qué vale la pena acelerar aquí?