No quiero sonar antisistema pero las redes sociales (al menos las más usadas) deberían desaparecer. En estos años las empresas de los gringos han tomado ciertas causas y movimientos de izquierda como una estrategia publicitaria, y al parecer la mayoría de la gente cree que el twitero llorón que usa emojis de la bandera arco iris, se autodenigra por su color de piel y compra productos de Apple es un "izquierdista radical", cuando en realidad, sin saberlo, es un aliado de los capitalistas lavado del cerebro como todos los que pasan horas en redes sociales. No sé por qué la gente no razona que lo que esas empresitas de redes sociales quieren es mantener a sus usuarios polarizados y peleando por cosas estúpidas para que sientan que son expertos en política y que salvan al mundo mientras ellos ganan más dinero. Al parecer los únicos que han razonado eso son los típicos "nazis" molestos de internet, pero su caso es especialmente gracioso porque aún teniendo conocimiento de ello, siguen haciendo uso de las redes sociales gringas para pelear con los que no están de acuerdo con ellos.