Fragmento de una historia autobiográfica que llamé "Enamoramiento y Decepción de Kathy".
Tambien lo hice como ejercicio literario, a ver si alguien más se motiva a escribir una historia personal y compartirla. He aquí una de tantas historias que tenemos guardadas por ahí, en la memoria.

Me espero a um fragmento tras el punto de inflexión para analizar el contraste de la decepción para una reseña más completa. Por ahora bien descrito, >>1.

El país estaba colapsando otra vez. Luego, vendría el descalabro, la insensatez del clamor popular por la represión. Las instituciones, intervenidas y luego desguazadas, daban lugar a otros tipos de corrupción. En democracia, no faltaba una corrupción sutil, pero tras el nuevo golpe de Estado (el segundo de la década) ya no era tan sutil la devoración de los humanos a manos del Nuevo Regente FURRO OBESO DICTATORIAL. Entonces, mis compañeros de armas y yo caímos en la sala de torturas y confituras del avieso furro. Vi a mis amigues ser confitados y devorados. Algunos rebeldes arrojaron bombas molotov, pero las cámaras con reconocimiento fatal les arrojaron el rayo fecal y les abrió las tripas. El contenido de éstas se desacargó en la vía pública y las fuerzas del orden hicieron paro, porque se quedaban sin empleo. También fueron "fecalizadas".
FURRO OBESO DICTATORIAL había engullido tantes militantos compañeres y fuerzas huelguistas que estaba empachado. Aproveché la oportunidad, seduciendo a una oficial furra loligata pettanko tsundere con máscara de pony policromada antigas. Pude escapar con ella hacia Uruguay, donde el sediento furro acabó con la sedición bebiendo toda el agua dulce con el mero objeto de aplacar su sed. Esto generó una desnutrición hidráulica en los belicosos charrúas, quienes estaban más que sedientos puesto que habían depredado mucha chipa de los aguerridos hermanos paraguayos.
Yo no quería huir al húmedo Brasil porque odio el idioma portugués que hablan allí. Pensé en Guayana o algo así. En esos países que no juegan la copa América. Pero eran infranqueables para los trogloditas como yo. A mi compañera, unos gendarmes la confundieron con un caballo y la faenaron delante mío. La hicieron mortadela, con la nueva tecnología inteligente artificial mortadelizante. Yo, disfrazado de gendarme inhalador de Resistol, comí un poco de su carne para mimetizarme con esta gente fagocitadora de humanos necroequinizados. Me odié a mí mismo, pero salvé el pellejo valiendo callampa rodeado del hampa. Sentí que todo era una mala película del Spiderman, esas clase B, donde lucha con Bin Laden pero termina fumando marihuana con él en una pipa hiperbólica. Luego Bin Laden se saca la máscara y ya no es un Bin Laden versión carnaval, sino que es Mia Khalifa: Pero sólo que no es Mia Khalifa, sino una joven Cecilia Bolocco caracterizada como Mia Khalifa. Spiderman es un negro tunguelé tunguelé cocó mandingo power con un afro capilar espectacular. Mientras una desabrida y monótona fornicación se reitera hasta lo ya mil veces visto, una voz monocorde de inteligencia artificial recita inarticulados fragmentos de Sartre. Con la voz de Kokú. Yo recuerdo pasajes de Houllebecq, de su libro de terapias de shock y entonces flash, la chica del bikini azul. Vuelve la democracia, ¡evohé, evohé! Pero el pueblo vuelve al hambre y la sed. Que se fueron. Pero ahora volvieron. También quisieron acceso a facebook y al negro del Whatsapp y a ser espiados con el entretenimiento perpetuo ilimitado durante millones de años de relleno y espoiler en un cumpleaños de ponys que se desvisten y no existen.
Luego, el delito, el destape, la droga, la inflación, las malas costumbres, las guarangadas en la tele, la frivolidad, los excesos al desnudo.
El cadáver del mítico FURRO OBESO MOMIFICADO vuelve a activarse con la mememagia de los conglomerados globales de capitales de Yoni's. Vuelven los militares robots a defender a los libremercados.
Se van.
Vuelven.
Se van...

Faltó un idilio entre Kokú y Kathy montando una cooperativa pero sigue siendo excelso. Es amor a la prosa con abundancia en metafísica y recursos capaces de refrescar el calentamiento global, aventando florituras emergentes financiadas por oenegés afines al think-tank-toe de Bernays y Goebbels. Fetén, mi raza negra.

A través de los años fui conociendo a otras personas, a los demás compañeros.
Algunos nombres fuertes eran José Domingo, Romina, Rommel y Camila: ésta última
era una peliroja pecosa que me hizo olvidar un poco a la Kathy, ya que tenía
un sentido del humor tan afín al mio, que nos burlabamos el uno del otro
toda la mañana y los dos parecíamos disfrutarlo mucho.
Con el tiempo el rumor se extendió como el ébola y en séptimo básico ya
estaba en boca de todos. Aunque a nadie le importaba realmente -sólo era
paranoia adquirida con los años-.
La Kathy con el tiempo fue bajando a la Tierra, se fue haciendo cada año
más material; una "Material Girl", que bailaba al ritmo de las SpiceGirls y
se creía Britney. Yo, ateo en colegio católico, ya cabeceando mis primeros
temas de Metallica. Black Album fue uno de mis primeros discos.
Ella caminaba contorsionando su brazo derecho, pegado el codo a las
costillas; lo movía de lado a lado queriendo representar a una vieja cuica.
Ya no era más que una caricatura de lo que fue en quinto, sexto básico.
Me enteré de que yo también le gusté un tiempo -Romina me informaba-. Sin
embargo, jamás desnudé mi corazón frente a ella.
Un mal día, todos mis compañeros y compañeras hicieron un carrete en la casa
de la Faby -todos los carretes eran en la casa de la Faby, "los buenos" (y digo entre
comillas bueno, porque la música de masas de aquella época, no era mucho mejor
que la basura de ahora)-.
Yo me lo perdí.
El lunes se acercó a mi la Nata y me preguntó si todavía me gustaba la Kathy.
Yo vacilé un milisegundo, con un nudo pasando por mi garganta -ya intuía la
verdad- y dije: No, ya no me gusta.
Había besado al negro José en la fiesta. Un supuesto mejor amigo mio.
Ése día dejé de creer en los ángeles.

Fin del fragmento microbiográfico titulado "Enamoramiento y decepción de Kathy"

Tuviste suerte, ya viste que no valía la pena.

En la casa de uno se juntó el "dishei" Callampa, quien valiéndose de las flamantes inteligencias artificiales, podía combinar a los Palmeras con Morrissey, a Delfin Quishpe con Slipknot y a Victor Jara con Bad Bunny. La gente, drogada con fentanilo y adherida con Resistol, no parecía apreciar mucho los artificios de la insustanciosa recombinación musical, por un lado anulada de mensajes y por otro, celebratoria del nihilismo que nos da lo mismo.
Las chicas parecían regalarse a cambio de una dosis de algo que frenara las funciones cerebrales. Pero a mí ya no se me paraba la tula, el pedacito se hacía pequeño con el frío marino y polar. Mi cuerpo lo sentía pues tenía la piel como pollo desplumado. Pero mi mente estaba dando vueltas en la luna que es toda oscura. Sonaba una cumbia rebajada con la voz de Vegeta. Algunas personas se empezaron a desgarrar la piel con las uñas. Otras se mordían a sí mismas. Yo pensé que estaban jugando a Condorito, no sé. Que uno era Cone, la otra Yayita o Yuyito y se daban topetazos y picotazos. FURRO OBESO parecía Doña Treme. Bueno, quizá no era FURRO OBESO. Pensé muchas cosas sin sentido, no sabía si rápido o lento. Tampoco sabía si efectivamente veía todo lo que mi mente fabulaba. La inconexión de ideas era atemporal. En un momento me sentía caer. Escuché voces sobre otro golpe de Estado, sobre la combinación artificial de Neil Gaiman con Stan Lee y el nuevo Spiderverso de Sandman, con SpiderDream, SpiderDeath, SpiderDesire y así. No me pareció una buena idea, pero hoy día cualquier basura que venda mucho supongo que es buena, porque permite comprar más droga. Hasta hay una droga que hace que se erecte el pico aunque el corazón esté sedado. Claro que existe el Viagra, pero la combinación con las sustancias depresoras del sistema nervioso central pueden hacer colapsar pichula y kokoro. Pero bueno, nada es para siempre. Siento calor sobre mis párpados y veo salir el sol. Pero sólo es Kokún haciendo el taiyoquén para vencer a los pacos. También cegó a los minions que envió Pixar para luchar contra los jóvenes descarriados.
Básicamente, otro año a la basura. El quinto o sexto después de la pandemia. Ya perdí la cuenta. Las orcas derrotaron muchos yates, pero los ricos fabricaron mucho microplástico fentanílizado y las ballenas se dieron una panzada que las hizo dormir con los peces. En una semana, todis aquí dormiríamos con los peces.
Ahora siento el frío.

Pero cuenta más >>1, ¿qué fue del negro José? ¿Siguieron siendo amigos? ¿Qué pasó con la Camila? Necesito una segunda temporada.

El Negro José fuese cooptado por la Patrulla Roja del nefando Doctor Güero, quien lo transformó en el androide "Masturbadingo 40000". Kathy fue su compañera de entrenamiento "Sybian-Pilates". Durante una de las sesiones (donde Bizarrap fue taladrado analmente), Kathy se quebró la cadera. Yo ya estaba desilusionado y disgustipado. Quise volver con la muchacha pelirroja, pero ella había viajado a Irlanda para un festival cervezal. Nunca volvió. Me refugié en el estudio. Estudié duro. Cada examen era más arduo, pero me ayudaba mucho pensar en datos abstractos. Mi último examen, el de próstata, me ayudó a reconciliarme con la vida.
El doctor, un hombre oblongo, de rostro batracio y cuerpo de oso, elevó su cosmoenergía y se reveló ante mí como una de las mitades de FURRO OBESO. Me dijo que si yo le pagaba siete consultas médicas, podría convertirme en la otra mitad de su ser y así alcanzar un gran poder. Y que ese poder conlleva una gran responsabilidad.
No sé si fue por el poder, o para sentirme parte de algo más grande que yo y así olvidarme de Kathy y del Negro José. Le creí un amigue, al mentado Negro, pero el perverso sodomita color brea no dejó upite sin romper. Hasta el pérfido Doctor Güero probó el pico del implacable y cetrino José. Un amigue no se comporta de esa manera.
Cuando la fusión fúrrica y obesa se concretó, descubrí que incluso con poder, la vida no mejoraba. La gente que tenía bajo mi dominio insistía en utilizar impenitentemente tarjetas de crédito y endeudarse. Emprendían compañías deficitarias que, tras meses de pérdidas, arruinaban familias. Familias numerosas engendradoras de larvas y esclavos. El suicidio infantojuvenil aumentó severamente.
Kathy estaba en su lecho de muerte.
La miré. Ya no había humanidad en mí. Pero igual quise mirarla.
Y me pregunté qué cosa vi alguna vez en ella.

>>1

FRAGMENTO MICRO POR NO GRÁFICO

una tabla de diez por diez
micropenes rugosos planos solitarios en distintas retorciones
para fingir que escribo con el escroto
y el título «los escrotos fundamentales»
la polución nocturna de orines en edad en que los niños se creen grandes
y grande es creer que los niños en edad de orinar turnan la volición
fundamental es el escroto titular
el temblor artrósico de los dolores por la escrófula hace que parezca que escribo
retorciones distintas por solitario se busca jovencita plana para el rugoso micropene
diez lucas por diez minutos, una tabla

La música sonaba fuerte, ruido, guitarras sin esperanza, ruido, bajos erráticos nos fuimos de la mano acercando a alguna parte más alejada, el baño era horrible, sucio y caluroso. Nos mirábamos, ya ni hablábamos ni lo intentábamos. Muros amarillos, ajados, alguna vez fueron blancos ya estamos dentro nos reímos con los ojos, sigue el ruido, da lo mismo. Contra un muro, nos servimos de un ángulo para rodearnos mejor, beso tu cuello y tu el mío, nos tiramos mordiscos, nos queremos desvestir pero no estamos cómodos, te abro la camisa y te toco, nos gusta, saboreo tu pecho me tomas de la mano, salimos corriendo del lugar, llegamos a la playa, corremos entre fogatas y otras parejas teniendo sexo con descaro, corriendo nos terminamos cayendo, rodamos abrazados, entre la arena seguimos girando abrazados y llegamos al agua, nos da lo mismo nos mezclamos con el agua, flotamos entre los destellos de la luna sobre la espuma, ya no somos quinceañeros, ya no fuimos esos quinceañeros, flotamos y seguimos en la hipnosis risueña del que sabe que no tiene idea hacia donde va, lo tenía preparado, cuando faltan certezas cualquier ruta puede parecer buena idea, tenía las maletas, un viaje en bicicleta sin destino definido, es un recuerdo tan vívido que nisiquiera fue necesario haberlo vivido, fuimos juntos hasta italia, ya a esta altura obviamente estábamos sin ropa, nos habíamos tocado harto y no distinguíamos entre los sabores tuyos y míos, a los pies estaba el jersey a rayas. El ruido seguía, la música nunca se detuvo, tenías mis rosas en una mano y con la otra me tocabas el hombro, mientras bailabas. Pasamos de la mafia, qué importaba lo que pasara después o lo que hubiera pasado antes, nos besamos y nos seguimos bañando en la playa.

Chiques y muchaches se están divirtiendo / con ese polvo blanco / y el pegamento / el tiempo corría y la petaca bajaba / antes nunca estuve / tan embalsamado / ni sentí jamás / tanta inflación / popocha en los pañales / popocha en los umbrales / pero el candidato / regala Resistol / "Votame y te la chupo", arenga en los carteles / pero estoy cansado / de tanto caminar, caminar, nena / sin poder hallar / una respuesta en el alcohol.

Y gritaré con el viento "Resistol" y tu sabrás donde estoy!

>>10 Con la Camila no pasó nunca nada, no era mi tipo de chica. Tenemos que contextualizar la edad: lo único que me interesaba en aquella época era una belleza de niña lo más idealizada posible; la única que cumplía con los requisitos era la Kathy. El negro José pasó a ser el huevón bacán del curso y yo comencé a juntarme con los recién llegados del año siguiente; pasé a una pseudo-clandestinidad encerrado en mi música, encuchando lo que llamabamos "pérsonal" (le pongo tilde porque así era, literal), un mundo que me fui creando en el anonimato.
Cabe destacar que el mismo año en que me decepcioné de ésta gente, fui calladito donde la chica más sensual del curso, su contrario (de Kathy) y le dije que me gustaba. Y como no, si en séptimo básico ya poseía unas caderas de lo más formadas, era la típica chilena de pueblo, de villa; mulata, morena, ojos calientes. Cuando le dije, con una timidez enfermiza, que me gustaba, me dijo. ¡Ah! Si, tu también me gustas un poco. Juntemonos mañana aquí después de clases...
Sorprendido de la facilidad del ritual, volví a casa a practicar con mi peluche del buho de la U que me habían regalado para la Navidad anterior y me quedé dormido.
A la mañana siguiente, tenía un motivo para ir a aquel antro Católico, del cual me expulsaron al siguiente año por haberme comido una ostia sin haber hecho la primera comunión, o algo así. Anyway, aquel día di mi primer beso. Aun recuerdo el aroma que ella expelía y éste quedó impregnado en el ambiente. A veces, caminando en la calle, huelo la misma fragancia y me trae el recuerdo. Bueno, a todos(as) nos pasa, supongo.

Los ejere cicios
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plantado el ujier
teje cilicios
cuya mujer
tiene implantes
de silicona