Quizás uno de los problemas políticos más importantes de nuestro tiempo sea el intento de introducir IDs biométricas digitales, sin las cuales seremos incapaces de comprar alimento, acceder a salud o participar de la vida pública. La infraestructura para esto ya existe y ya está puesta, sería trivialmente fácil establecerlo presentando una app obligatoria de "servicios públicos".

Si oyes a la gente que quiere esto, notarás que intentan ofuscar la dimensión política de la discusión formulándolo como un inevitable desarrollo de "la tecnología". Intencionalmente presentan a "la tecnología" como una especie de fuerza indiferente y monolítica, como si sus planes fueran una reacción a un cambio imparable y no el cambio propuesto mismo.

Tony Blair y Yuval Harari discuten las IDs digitales bajo estos términos, haciendo "predicciones" que se asume debemos obedientemente llevar a la realidad, de lo contrario arriesgamos hacer enojar al dios pagano Tecnología. Es importante hacer explícita la naturaleza política de nuestra oposición a estas ideas y acabar con el mito de la tecnología como una fuerza parahumana - ellos te quieren supersticioso, ellos te quieren creyendo que la tecnología es "mágica".

Las dos preguntas importantes sobre la tecnología son: 1. ¿quién la posee? y 2. ¿para qué la están usando? No existe tecnología para la cual estar dos preguntas no apliquen.