Engels era un traidor de su clase, pero aún tenía la furia burguesa en la sangre. Despreciaba la holgazanería y la embriaguez de Marx. Necesitaba que Marx produjera teoría, pero Marx se pasaba el día emborrachándose en el sofá y leyendo, así que ideó un plan: inventó a un personaje llamado Max Stirner. Esto molestó tanto a Marx que escribió furiosamente miles de páginas. Misión cumplida.
Prometió a sus compañeros de aula algo y luego no sucedió. Traidor de su clase. Esto fue en la escuela cuando todavía no había cambiado la voz. La furia se la inyectaron en vena y en ese momento todavía no se le habían pasado los efectos, así que el borracho de Marx fue a ver a su sobrino, Groucho, para obtener ideas a partir de su primer largometraje. Fermentó celuloide virgen para crear una bebida espirituosa de nueva generación, con un sabor explosivo y ardiente.
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